“La educación es un ornamento en la prosperidad y un refugio en la adversidad.” Aristóteles.
En un mundo globalizado, la competitividad territorial es una herramienta muy valiosa de desarrollo, las ciudades buscan su vocacion y atraer inversion que les permite reducir los indices de desempleo y mejorar la calidad de vida de sus habitantes, entre otras cosas.Existen por supuestos muchas variables economicas pero hoy quisiera referirme a la formacion al interior de las empresas.El gobierno hace esfuerzos enormes por ampliar la cobertura de educacion en todos los niveles, pero la informalidad empresarial que el ministerio estudia para controlarla, da cifras como esta, el 70% de la fuerza laboral esta en esa economia.
El ingreso percapita de Colombia frente a las cifras de OCDE tampoco son optimistas, 10.303 USD frente al promedio de los paises miembros que es de 35,453 USD, por supuesto que el analisis de esta cifra es complejo frente a nuestra realidad como pais, pero las empresas en cordoba como en todo el pais tienen un reto hacia la mejora de esos ingresos. La carga tributaria es la excusa generalizada de los empresarios para pagar bajos salarios.
Entre los factores que encontro el ministerio, se encuentra la poca exigencia de formacion en algunos territorios para los perfiles tecnicos y profesionales, las empresas buscan personas que acepten condiciones bajas de salario y en ocasiones sacrifican el nivel academico para contratar a los trabajadores, esto determina un talento humano de poca formacion y en ocasiones aumenta la rotacion de personal por los bajos salarios. Este circulo vicioso debera cambiar si buscamos ser competitivos.
Algunos de los retos que deben asumir las organizaciones, deben girar alrededor inicialmente, en crear perfiles altos en sus cargos ya sean tecnicos o profesionales y estudiar rigurosamente las politicas de compensacion incluyendo salario economico y salario emocional alrededor de otras necesidades humanas, deberan hacer alianzas con instituciones educativas para mejorar la formacion al interior de la empresa, haciendo un juicioso estudio de necesidades para el crecimiento y la optimizacion de los procesos.
La oferta academica es abundante en el mercado, pero el acceso a ella es muy bajo, por falta de recursos economicos, por la dificultad del tiempo dedicado a la formacion y por la falta de exigencia en las empresas para impulsar el desarrollo humano desde la educacion. Un profesional para sobrevivir sacrifica sus ingresos con el objetivo de entrar al mercado laboral y esto es aprovechado por las empresas.
LUIS MARTINEZ GARCIA
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